En este artículo os queremos mostrar como el metabolismo es uno de los mayores mitos y excusas cuando quieres bajar de peso.
Tengo un amigo, vamos a llamarle Adolfo, que se alimenta a base de comida rápida y comida precocinada, come dulce y le encanta la cerveza.
Evidentemente, tiene sobrepeso tipo 3 y a pesar de sus 38 años empieza a sufrir de patologías metabólicas serias.
Le encanta la fruta, concretamente pera, y se come mínimo un par todos los días.
Con esto último se autoengaña pensando que no lo hace tan mal para estar en el estado en el que está.
Siempre nos dice que su metabolismo es lento y no puede hacer más.
De muchas personas e incluso lo hemos escuchado de profesionales sanitarios que el metabolismo es un proceso biológico estático.
Que hay personas con un metabolismo lento y otras rápido, así nacemos.
¿De verdad?
Veamos;
¿Qué es el metabolismo?
Lo podemos definir de la siguiente manera: El metabolismo son todas las reacciones químicas involucradas en el mantenimiento del estado de vida de las células y el organismo.
¿Lo has leído? Células y organismo.
A esto, el metabolismo se divide en dos categorías:
- El Catabolismo: Que es el proceso de descomposición de moléculas para obtener energía.
- El Anabolismo: Que es la síntesis de todos los compuestos que necesitan las células.
Así que ya podemos afirmar que el metabolismo está estrechamente relacionado con lo que comemos, la biodisponibilidad de los nutrientes y nos atrevemos a afirmar que incluso cuando comemos.
Otra de las expresiones comunes, bueno, diríamos muy comunes que escuchamos a diario, es: “No como casi nada, pero no hay forma de bajar de peso, o me cuesta mantener mi peso”.
¿Cómo es posible?
En realidad, nos han metido en la cabeza tantos mensajes que las “calorías que comemos influyen para mantener la línea”, que hay ciertas personas en un estado severo de desnutrición.
Cuando hablamos de desnutrición, nos referimos a bajos o muy bajos niveles de nutrientes clave en su torrente sanguíneo.
Los nutrientes en relación con el metabolismo abarcan los requisitos en las funciones individuales del cuerpo, la cantidad necesaria, el nivel por debajo del cual se produce una mala salud.
Muchísimas personas todavía infravaloran la alimentación como principal vía de un estado saludable.
Esto último, va a ser mucho más importante cada vez en un mundo altamente industrializado y poco natural.
Los nutrientes esenciales suministran energía y aportan las sustancias químicas necesarias que el propio cuerpo no puede sintetizar o crear de forma natural.
La dieta necesita nutrientes esenciales como carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, fósforo, azufre y alrededor de otros 20 elementos inorgánicos.
Tu alimentación diaria necesita aportar nutrientes a tu organismo y no solo alimentarte.
Tres factores donde el metabolismo influye:
- Tu metabolismo en estado de reposo. Básicamente, aunque no te muevas, tu cuerpo está metabólicamente activo.
- Cuando digerimos los alimentos que comemos, el metabolismo se activa para hacer esa función.
- Cuando hacemos ejercicio, sometemos al organismo a un estrés, aumentando su actividad.
Básicamente, esto es el metabolismo a grandes rangos.
“Si nos imaginamos el metabolismo como un pastel”
Esto sería un 70% de todos los procesos.
Permítenos una analogía: “Imagina tu metabolismo como una locomotora cuanta más velocidad necesitas, más combustible consume”.
Como puedes ver tu metabolismo no es un proceso estático sino dinámico.
Si comes alimentos ricos en nutrientes y por ende aumenta también la energía más activo estará el metabolismo.
Si, por el contrario, comes poco y mal, y tienes poca actividad, tu tasa metabólica se ralentiza.
Viéndolo al revés:
La energía para varias funciones del cuerpo humano proviene de las moléculas de nutrientes que se han descompuesto, en un proceso llamado metabolismo.
En los humanos, la energía del cuerpo proviene de las grasas, carbohidratos y proteínas de los alimentos.
De las tres moléculas orgánicas, la grasa es la fuente de energía más concentrada porque proporciona más del doble de energía que las proteínas o los carbohidratos.
Las necesidades energéticas se expresan normalmente en términos de calorías o kilocalorías.
Una kilocaloría (kcal) es la cantidad de energía térmica necesaria para elevar la temperatura de un kilogramo de agua en un grado Celsius.
¿A qué viene este «rollo»?
Si quieres conseguir un metabolismo activo y eficiente, en términos de selección de alimentos, las grasas y las proteínas (por este orden) son preferentes a los hidratos de carbono.
Así que, si has leído todo el artículo, esperamos que hayas entendido que son los alimentos los que aportan los nutrientes necesarios para que tu organismo funciones en condiciones correctas y sin escasez.
Ahora…
¿Vas a elegir a partir de hoy los alimentos correctos?
CONCLUSIÓN: La actividad metabólica te dice mucho de como una persona se está alimentando. Quítate la creencia de que el metabolismo es lento o rápido y que tú no puedes hacer nada.
Lo que comes a diario si puedes elegirlo y eso influye en tu metabolismo, si quieres estar saludable, asume la responsabilidad.
Recuérdalo…
Hasta pronto.
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